Ante todas las cosas, espero que sepas apreciar la vida.
Comprender el lenguaje del silencio y el poder de los gestos.
Reír con todas las fibras del cuerpo, sin importar la hora o el día.
Reflejarte con valentía en la vida de los otros y desde ahí, respetar y comprender.
Y por sobre todo, no juzgar.
Reír con todas las fibras del cuerpo, sin importar la hora o el día.
Reflejarte con valentía en la vida de los otros y desde ahí, respetar y comprender.
Y por sobre todo, no juzgar.
Ojalá tengas la suerte de encontrar una razón para amar día tras día.
Paralizarte para ser testigo de los milagros de Dios.
Y hacer que cada segundo cuente sin que te arrepientas de nada en lo absoluto.
Paralizarte para ser testigo de los milagros de Dios.
Y hacer que cada segundo cuente sin que te arrepientas de nada en lo absoluto.
Para que tus sueños te mantengan a flote y la voluntad de hacerlos realidad te permita recordar por qué vale la pena vivir.
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