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viernes, 18 de junio de 2010

Invisible

Tus ojos quiero olvidar asi como tu supuesta sonrisa; quiero en este momento invisible tu cuerpo.
Tus palabras dicen que yo sin ti no puedo vivir, y con el tiempo compruebo como en otras cosas lo equivocado que estas.
Coloqué en mute todo lo que venga de ti, poco a poco voy retomando el control e invisible se van haciendo tus huellas en mi.
Hasta puedo sentir la despedida de mis sentimientos hacia ti, mientras van caminando hacia atrás, haciéndose invisibles en la niebla.
El olor de tus besos se vuelve invisible, en las noches eres sol por lo invisible que te haces; y pensar los tantos sueños, la fe que depositaba en ti y hoy todo es invisible.
Hoy tengo edad suficiente para decir que cuando nos conocimos fue temprano y asi mismo, tarde se nos hizo.
Invisible, invisible los latidos de tu corazón, invisible el daño en mi corazón, invisible la cortada, invisible tu...

Invisible tu intención para conmigo, invisible pues hoy vivo sin ti.

Casi desahogo

Si pudiera todo esto que yo sueño, hasta las guerras y el hambre se acabarían, pero al mismo tiempo entiendo que no todo es posible solo de desearlo y cerrar los ojos, el mundo no se detiene aunque por dentro me desgarre.
Si yo contara los premios otorgados por las cosas hechas, ay como quedaría de pobre! Me alegro por aquellos que encuentran su momento y se van, sin siquiera mirar atrás; mientras yo sigo cometiendo el mismo error, termino esperando a las personas.
Y me quedo viendo al cielo, todas las estrellas que nombren tuvieran si por ustedes quisiera. Cuántas veces no me he perdido y me he sentido un tanto más segura porque de verlos me viene el alma al cuerpo.
Mira que lento pasa el tiempo cuando tenemos los ojos pegados al reloj, como se nos pasa corriendo aquello de lo que queremos ser dueños, y yo me canso, hoy no encuentro final ni partida, porque estoy herida y por tal, me converti en perpetuadora de horror y no sonrio, porque no me posee la maldad de los villanos, mas bien me acompaña la verguenza y el dolor, una tristeza que me toca y me espeluca el cuerpo entero.
Me deambulo por las calles, alcanzo las esquinas, no lo pienso dos veces, yo a ustedes los llevo en el pecho... Pero el reino no se construye de deseos y de esos tantos pocos momentos que me pierdo, hoy llegó uno de esos y al cuerpo no me llega nada bueno que me haga reir al menos.
Lo siento, por dedicar estas letras, pero este es el resultado de una sutura barata!

Algo asi me ha pasado antes, creo que vine con un "toque" achicado de fábrica... La cosa es que perdí la balanza entre lo que vale grande y lo que pesa nada, y lo juro, si pudiera dejara toda esta pesadez a un lado para irme a correr con el viento, pero la gravedad me estanca en esta tierra.