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lunes, 28 de mayo de 2012

Complejidad vs flexibilidad

¡Vaya disyuntiva! Recobrar consciencia de todo lo llamado “automatismo”, de las cosas que vivimos sin sobrellevarnos a nada.

Flexibilidad o mejor, flexibilidad de género, porque mira lo que cuesta que un hombre de esos que auto-clasifican “bien formado” muestre un tanto de franqueza en cuanto al corazón se trata.

Pasando la página, figura la primera causa de consulta de un gastroenterólogo o psiquiatra/psicólogo: la complejidad, entiéndase tanto la raíz compleja antagonista de la simplicidad, y del muy padecido y ocultado complejo, ese cargamento que llevamos a arrastra hasta el más extrovertido y echado pa’ lante.

¿Dónde convergen estas matrices? ¿Dónde se equilibran las porciones desajustadas de los neurotransmisores que nos hacen ir de un lado a otro?

Llamemos entonces a la balanza universal, el que al complejo se arrima ya sea por inferioridad o análisis excesivo, ése queda solo, sumergido en esa piedad incorregible o simplemente erguido en la piedra pulida de algún monumento, al que haya supuesto su atención.

Por otro sendero, yace el que nada entras las aguas de la flexibilidad, el que vive en constante riesgo como si tuviera un aneurisma, viviendo a expensas del momento el que la mala hora lo alcance.

Entonces, ¿qué se hace?

Se replantean las cosas, lo que es del corazón se vive como no, pero implementando el filtro de la compleja razón, quien no podemos permitir nunca nos considere menos, pero tampoco más de la cuenta.

Aprendamos a que lo único equilibrado sea la sonrisa, aunque en momento se llore como lunático.

Pasar por esta vida en busca de los sueños pero disfrutando del paisaje.

Como dicen: el que no espera nada de nadie, vive más y mejor.

¿Por qué? Porque sabe que hay versus donde no existen ganadores ni perdedores, donde muy a pesar de las leyes universales, lo que nos amarra y lo que nos libera depende de nuestras propias batallas.

Complejidad vs flexibilidad, ¡qué disyuntiva resultó ser YO!

martes, 22 de mayo de 2012

Confrontación… paso 1267…

Cuando analizo la cronología de los acontecimientos pienso: ¡me tienen que estar jodiendo!

Sin embargo, sigo asumiendo el control, como lo he hecho, pues este control, mi control no lo cedo nunca más.

La numeración elevada corresponde a los muchos intentos fallidos en el pasado, hoy agradezco la indemnidad de mi memoria retrógrada y anterógrada, y eso que no se trata de rencor.

¿Que si continúo reviviendo lo pasado? No. ¿Que si a lo pasado, pasado? No. Y mira que yo no soy vengativa, solo que tampoco soy Jesús para colocar la otra mejilla una y otra vez.

Parece mentira el tiempo transcurrido, la impresión que produce el enmudecimiento de los recuerdos que hoy no son más que trazos en una superficie desgastada.

¿El pálpito? Asumo que es obvio, yo no soy de hierro, solo espero que la confrontación que aterriza sin preaviso sepa que tengo una maestría en azote y que los tiempos de titubear así como los pasos de grandes numeraciones que requería, han quedado en el ayer, caídos y derrumbados.

viernes, 18 de mayo de 2012

Mi amor

Hay cosas que puedo escribir sólo al verte, esa adrenalina por el temor de quererte dar mi vida entera.

Pasa mi amor, que cuando te miro a los ojos, me ves y más que eso, puedo sentir la felicidad aproximarse como una avalancha sin medida.

Mis manos se arropan con las tuyas, cada día más compactas, nariz con nariz, sincronizando respiración.

En medio del suspiro, puedo saber que ésto es para siempre, lo que me falta al separarnos, lo que sale victorioso en cada jugarreta de destino.

Tantos motivos para renunciar a ti, hoy son nada, porque han nacido mejores razones para querer la vida junto a ti.

Quererte amar por siempre, titilar de emoción porque te tengo al frente, en ese espacio diminuto que separa tu corazón del mío.

Mi amor, yo quiero el cien por ciento contigo estar, forjar la historia más bonita, conquistar los sueños que nos acompañan desde el amanecer hasta el ocaso.

jueves, 3 de mayo de 2012

Somos

Saber que tengo el poder y la razón ¿cómo ha de causarme mayor pavor?

Debatir las relaciones con los principios, mantener una buena charla en medio de un trabuco, asaltos, sol y lluvia.

¿Quién eres tú y quién yo? ¿Dónde nos separamos para llegar al camino de la divergencia?

SOMOS y aún así nos quejamos, porque la lucha constante contra nuestra sed aberrante es absurda en su totalidad.

Entonces, ¿quién? Que nos entienda, que nos acompañe, que nos levante y nos rete; ¿quién con el coraje y los pies bien calzados?

Me cuesta separarme de aquello que llaman vida mundana, y no hablo de los vicios, hablo de los ritos que mantienen mi corazón adicto.

SOMOS y aún así nos quejamos, porque la vida nos queda corta y aún así, grandes los sueños.

Porque la rutina nos envuelve y ataja a los débiles, ¿por qué? Y no hablo de los responsables, si no de los rígidos, de los que bostezan ante emociones extremas.

La vida es un cartón de modalidades, de oportunidades, de actos mágicos que nos atacan e incluso nos azotan porque al milagro le da furia que no lo reconozcan aunque les venga de frente.

Continuamos andando inertes aún cuando la transformación del mundo se nos viene, somos parte de la masa, a veces prole, capaz incluso de mover al mundo cuando cae el día.

SOMOS los receptores de la esencia.

SOMOS parte de la comunión divina, de los tesoros, de los aromas y colores, de los ángeles y superhéroes.

SOMOS auto-superables, auto-renovables.

SOMOS y aún así nos quejamos.